Sobre emocionarse con el arte y entrenar la mirada

Sobre emocionarse con el arte y entrenar la mirada

Arte
Toda forma de arte es un acto comunicativo. Es decir, el arte, pese a existir dentro de sí mismo y tener unos valores incorruptibles que dependen única y exclusivamente de sus logros particulares, no respira fuera de la mirada del que está al otro lado. Debe transformar, debe dar forma a una realidad, debe herir o sanar; debe ser percibido por la materialidad cognitiva de otros seres sintientes para completar su viaje. Como toda comunicación, está sujeto al requisito del emisor/receptor, y también al de definirse alrededor de un código (sea cual sea) que sirva para interpretarlo. ¿Esto qué quiere decir? Que da lo mismo que estemos ante una obra de arte narrativa (la mayor parte del cine o la literatura, por ejemplo) que de una eminentemente estética o contemplativa…
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